sábado, 31 de enero de 2009

Posturas


Hacía una noche de perros, las gotas de lluvia se te clavaban en la carne como clavos.
-¿tienes frío?
No respondí.
Arranqué un par de ramas del árbol, y me quedé absorto observándolo, mientras me preguntaba que sentiría si me arrancaran partes del cuerpo y no tuviera posibilidad de expresar dolor, rabia, lástima... El sentimiento me dolió tanto, que rompí a llorar instantáneamente.
-Nunca antes sentí tanto frío, el interior de la gente se congela a mi alrededor, pero estamos ocupados como para darnos cuenta.
La sangre nos circula a 36 grados, pero al corazón regresa fría, tan fría como en realidad somos.

lunes, 26 de enero de 2009

Almas sedientas acaban solas, arañando solo años


Alcanza lo imposible, rozalo con los dedos.
Siente lo inalcanzable, rompe los mitos, deshazte de los prejuicios.
Acaricia la cara buena de la vida, escucha a tu corazón, realiza saltos mortales.
Saborea los sentimientos de la gente, rodeate de quien te quiere rodear, prepara pasteles.
Ahorrate el resto, pero no dejes de vivirlo.
Sabes ahora que la felicidad es una impresión de ti mismo siendo lo que quieres ser.
Ahora, ahora si que lo notas.

lunes, 19 de enero de 2009

Tardes castradas

Penúltimo en llegar al lugar, haciendo caso omiso de su instinto.
Se perdió sin llegar a asustarse, se quedó en ese breve lapso de tiempo que atormenta al consternado, sin llegar a helar la sangre del valiente. En la cámara sin colores, el lugar en el que tenía por costumbre esconderse en los momentos de incertidumbre.
Su camino siempre fué fácil, o así lo veía ahora. Nunca tuvo que afrontar decisiones dificiles que, por uno u otro motivo alguien había tomado por él.
Ahora todo era demasiado complicado, tenía que escapar demasiado a menudo a su espacio, y cada vez le era más difícil volver.
Temía, más que no volver, el que nadie se percatara de su ausencia.

martes, 13 de enero de 2009

Insatisfacción


No se de quien me enamoré, no se de quien sufrí altercados, ni repentinos arrepentimientos.
He aprendido a no saber, he aprendido a caer y levantarme, para sentir bien lo que soy.
Me preocupo solo por mí emborrachandome de silencios incómodos hasta acomodarlos, silenciando la comodidad.
Llorar es solo un modo de expresión, como lo pueda ser matar al prójimo, pero matar es pecado.

domingo, 4 de enero de 2009

Pendiente de la creciente de pendientes descendientes


Agarrando los segundos con las uñas, para que no resbalen.
El tiempo es solo una percepción del ser humano, pero no podemos controlar la manera en que interpretamos esa dimensión.
Así perdemos los instantes que valdría la pena resguardar, sometiéndolos al continuo esfuerzo de velar por nuestra felicidad.
La felicidad es lo que vemos desde la ventana de un tren, es el reflejo en un charco cuando corremos, es el segundo que no puedes agarrar ni con las uñas, es lo mundano de lo increible.