Asimilando la oscuridad, cuando nada esperas que no sea desesperación, los tenues destellos de un alma atormentada, aún cayendo en la oscuridad, me iluminaron lo suficiente para salvarme a mi mismo, rescatando también al pobre diablo que caía.
martes, 14 de octubre de 2008
Senderos de este infierno
Asimilando la oscuridad, cuando nada esperas que no sea desesperación, los tenues destellos de un alma atormentada, aún cayendo en la oscuridad, me iluminaron lo suficiente para salvarme a mi mismo, rescatando también al pobre diablo que caía.
Etiquetas:
Japón
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